La semana pasada en un día habitual de trabajo como acreditado en Casa Rosada llegué temprano y pasé por el comedor para ver que había para calmar los intensos gemidos estomacales. Por nada más que $ 3,50 se servía una entrada de vegetales: lechuga, palta, zanahoria y remolacha rallada con queso parmesano, el guisito de lentejas con panceta y chorizo colorado que ven servido en el clásico plato del comedor de la rosada con el escudo argentino, y para cerrar dos rodajas de ananá en almívar. Nada mal. Después de la cobertura de algunas actividades del Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, llegó el cierre y postre de la jornada con un acto de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que luego de hacer su actividad central salió a recorrer los diversos patios internos de Balcarce 50. En la postal, hablando a la militancia juvenil en el Salón de los Héroes Latinoamericanos.
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