sábado, 10 de diciembre de 2022

CFK condenada refuerza su centralidad y termina con las aspiraciones de Alberto

La semana de Alberto Fernández empezó otra vez complicada. Es que había una abultada agenda que su equipo armó para mostrarlo activo y gestionando, pero que otra vez quedó en la intención, ya que fue superada por la inmediatez y la necesidad de seguir en la improvisación permanente.

Juan Cabandié (Ambiente) tuvo que llevar adelante en soledad el acto en Tecnópolis donde se presentó el Convenio Colectivo de Trabajo del Cuerpo de Guardaparques Nacionales. Lo increíble fue que la portavocería enviaba el aviso de que en minutos el Presidente hablaría en la actividad a la que nunca fue. Es que sin que nadie supiera, el Mandatario estaba en Casa Rosada atendiendo dos problemas que venían de arrastre y le estallaban en las manos.

Uno, era el no pago de los Potenciar Trabajo, que encima traían la novedad de más de 20 mil bajas. El viernes anterior, el propio jefe de Estado -junto a Victoria Tolosa Paz (Desarrollo Social)- prometió al titular de la UTEP (Unión de Trabajadores de la Economía Popular), Esteban "Gringo" Castro y a su aliado en el Movimiento Evita, Emilio Pérsico, que las auditorías se iban a dejar para febrero del año que viene y que se pagaría a la totalidad de los beneficiarios, más allá de la judicialización.

Eso no pasó, y el 5 de diciembre (fecha de depósito del plan) llevó a que los dirigentes de las organizaciones sociales le incendiaran el celular a Fernández, quien había tenido que digerir las amenazas de Castro en el Puente Pueyrredón, sobre la posibilidad de que se termine la paz social y que el mandato de este fallido gobierno del Frente de Todos finalice antes de tiempo.

Sin dudas, el Presidente quedó resentido con el éxodo y vuelta del Evita a la huestes de Cristina Kirchner. Es que con esa última estocada, sus ambiciones reeleccionistas han quedado en una anécdota que empieza a formar parte de un pasado que se aproxima inexorable.

El otro dilema que motivó un lunes agitado, fue el reclamo que desde días previos le estuvo haciendo el ala dura del cristinismo. La exigencia tenía que ver con que Fernández saliera a denunciar públicamente la reunión “secreta” que jueces, fiscales, agentes de la ex SIDE, funcionarios opositores y empresarios de medios del Grupo Clarín, llevaron adelante en octubre en la estancia del millonario británico, Joe Lewis.

Así fue que el mandatario acató, y pasadas las 15 hs brindó una inesperada Cadena Nacional donde informó que había instruido al ministro de Justicia, Martín Soria, para que denunciara por incumplimiento de los deberes de funcionario público y admisión de dádivas a los magistrados: Julián Ercolini, Carlos MahiquesPablo YadarolaPablo Cayssials, al fiscal General porteño, Juan Bautista Mahiques, y al ministro de Seguridad y Justicia de la CABA, Marcelo D’alessandro.

Quienes fueron sindicados por el Gobierno como los que otorgaron los óbolos a los nombrados figuran: Jorge Rendo (CEO de Clarín), Nicolás Van Ditmar (administrador del inmueble de Lago Escondido perteneciente a Lewis), Leonardo Bergroth (ex director de asuntos jurídicos de la entonces Secretaría de Inteligencia del Estado), y a Tomás Reinke (especialista en publicidad digital y política).

La controversia que tuvo el Presidente con este tema fue que su jefe de asesores, Julián Leunda, era uno de los nombrados en el escándalo de chats que salió a la luz entre los protagonistas del cónclave, al que el Instituto Patria considera como parte de una conspiración contra la senadora Kirchner y su fuerza.

Para ellos, el hombre que suplió en el cargo a Juan Manuel Olmos (actual vicejefe de Gabinete) cumple las mismas tareas que ejecutaba Juan Pablo Biondi, el amigo del Presidente y ex Secretario de Comunicación y Medios que fue expulsado del cargo por promover operaciones de desgaste hacia la Vicepresidenta, La Cámpora y el resto de su entorno.

El pedido de renuncia hacia Leunda fue unánime desde el núcleo duro kirchnerista, y Fernández volvió a conceder, del mismo modo que hizo con tantos otros ex funcionarios suyos a los que les soltó la mano con la finalidad de mantenerse en ese poder virtual que responde más a un orden institucional que real.

Una frase que dejó un ex seguidor del Mandatario grafica un poco lo que sienten muchos de los que tiempo atrás creían en el ex jefe de Gabinete de Néstor y Cristina: “Alberto primero te escucha, después te clava el visto, y al final te entrega”.

Las urgencias hicieron que se le pidiera al gobernador jujeño y jefe del radicalismo, Gerardo Morales, que no asistiera a la audiencia que tenía prevista con el titular del Ejecutivo, quien de repente salió solo y apurado por la explanada de la sede de Gobierno con rumbo desconocido. La banderita argentina que flamea en el frente del palacio gubernamental -para indicar que el Presidente está en la Casa- se mantuvo igual. Nadie supo adónde fue, ni siquiera sus más estrechos colaboradores.

Al volver a su despacho, decidió que participaría del evento programado en el Museo del Bicentenario, donde se anunciaría el Refuerzo Alimentario en los partidos del conurbano bonaerense. Los intendentes que asistieron a la actividad bajo un calor extremo -que se potenciaba debido a que los aire acondicionados del lugar habían dejado de funcionar- escucharon atentamente como Fernández y Tolosa Paz volvían a intimidar a los movimientos sociales, recalcándoles que es necesario que quien no necesite un plan social le deje el lugar a otro, subrayando la idea de que no va a haber marcha atrás en el recorte de beneficiarios.

El día más esperado llegó el martes, cuando el TOC N° 2 daría a conocer la sentencia por la causa “Vialidad”. Fernández asistió en la mañana a Montevideo para recibir la presidencia pro tempore del MerCoSur, que le entregó su par Luis Lacalle Pou. En ese contexto, otra vez los dos presidentes rioplatenses se cruzaron por los acuerdos con la Unión Europea. El mandatario argentino le dijo que "la solución no es que cada uno haga lo que quiera". El uruguayo le respondió que él no era el rupturista. Lo cierto, es que la grieta en el bloque regional promete continuar.

A las 17:30 dio inicio la lectura del fallo contra CFK, Lázaro Báez (empresario acusado de testaferro de Néstor K), y varios ex funcionarios del kirchnerismo. Aunque se esperaba que hubiera una condena, que en este caso fue de 6 años de prisión por administración fraudulenta, el eje del descargo que luego hizo la ex presidenta, giró en torno a la inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos.  Otra cosa que hizo ruido fue la absolución del otrora poderoso ministro de Planificación Federal, Julio Miguel De Vido.

El jefe de Estado voló en helicóptero desde el otro lado del charco hacia la Residencia de Olivos para escuchar la sentencia y el duro alegato que después hizo la jefa política del Frente de Todos, que le dio a él y a otros incautos, la mayor de las sorpresas, cuando después de repasar los escandalosos chats de “Los Huemules”, se dirigió a Héctor Magnetto (máximo CEO del Grupo Clarín) para decirle que en 2023 no va a ser candidata a nada, y que no tendrá fueros cuando deje la vicepresidencia. Remarcando que prefiere ir presa antes que ser su mascota.

De esa manera, Cristina le habló elípticamente a todo el Partido Justicialista, con sus gobernadores y sindicalistas peronistas, que hasta hace poco coqueteaban con Alberto y ahora lo hacen con Sergio Tomás Massa. A partir de ese renunciamiento se puso en acción el operativo clamor, que no implica que CFK se contradiga y vaya en alguna lista, pero sí que conserve la lapicera que defina las boletas de cara al 2023.

Después de semejante revelación, el silencio de radio invadió al “albertismo”. Sin embargo, la primera que se animó a salir al ruedo tuitero en defensa de CFK fue la contemporizadora Vilma Ibarra, quien desde la secretaría de Legal y Técnica de la Presidencia escribió a las 20:03hs que “Un tribunal federal sospechado de parcialidad, con enorme debilidad probatoria y claro desprecio a las normas que rigen el funcionamiento del Estado, dicta fallo condenatorio a CFK, dirigente popular elegida dos veces presidenta y ahora vicepresidenta de la Nación”.  

A las 20:14, Massa se solidarizó con quien ahora le hace recuperar las esperanzas de ser presidenciable en 2023 o en 2027. Recién a las 20:48, Fernández publicó un largo hilo que empezaba con estas palabras: “Hoy, en Argentina, ha sido condenada una persona inocente”. Su portavoz, Gabriela Cerruti, recién dio señales de estar en tema a las 20:56, cuando puso en un breve texto: “Esta tierra de mujeres valientes hoy vuelve a conmovernos. Todas con vos, compañera @CFKArgentina”.

El miércoles, en la previa al fin de semana largo, no hubo agenda presidencial, sólo algunos ministerios tenían actividades. De todos modos, Alberto Fernández prefirió pasar el día en Rosada y no en Olivos, algo que escoge hacer desde que volvió de su extensa gira internacional donde sufrió esa descompensación que le hizo temer la posibilidad de quedar totalmente fuera de juego.

La novedad que lo circundaba era que debería compartir el encuentro del Grupo de Puebla en el CCK este lunes 12/12 con su Vice, en otro de esos clásicos reencuentros “después de las tormentas”. Es cierto que hablaron por teléfono luego de que se conociera el fallo, pero siempre desde esa lejanía que se potenció con la derrota en las PASO de 2021.

Lo que hizo Fernández ingresara en un virtual estado de abulia, fue el hecho de enterarse que el peronismo, en su gran mayoría, movilizaría para respaldar nuevamente a quien sigue concentrando el principal caudal de votos en esa populosa fuerza política.

La novedad del resultado de un test de Covid, que le dio positivo a la Senadora, pospuso por una semana la cumbre regional que seguramente (modificación de agendas mediante) contará con la presencia de ex presidentes como Rafael Correa (Ecuador), Evo Morales (Bolivia), Pepe Mujica (Uruguay), José Luis Rodríguez Zapatero (España), y Ernesto Samper (Colombia), además de la Vicepresidenta de España, Yolanda Díaz.

El percance sanitario le otorga más tiempo a quienes ya iban a movilizar, para pergeñar una logística aún más grande de la que estaba prevista. La aparición de esta Cristina condenada por los poderes fácticos, como entienden sus seguidores, depara un escenario impredecible, en sus palabras y en los hechos.

La consigna del foro de Puebla será “Voluntad popular y democracia. Del partido militar al partido judicial, las amenazas a la democracia”. En un comunicado, el Grupo sostiene que “la actividad busca denunciar la guerra jurídica (lawfare) contra la ex Presidenta de la Nación Argentina y entregarle apoyo transversal”.

La estrategia opositora pasa por asegurar que con esta avanzada judicial sobre CFK, el kirchnerismo y su simbología “populista” están acabados. Detrás de escena no dicen ni piensan lo mismo. La coyuntura vuelve a poner a la ex presidenta en el centro de la escena, algo que probablemente no alcance para ganar una elección, pero según prevén propios y extraños, le puede permitir elegir otro delfín que al menos salve al peronismo de una desmesurada derrota en las próximas elecciones. Esas en las que quien gane, las tendrá más difícil que las administraciones de Cambiemos y del FdT.  


Fuente: Juan Pablo Peralta desde Casa Rosada para la agencia internacional Globatium. Más información exclusiva de Balcarce 50 a través de Twitter en @JuamPaPeralta y en IG: @juanpabloperaltaperiodista

No hay comentarios: