domingo, 28 de noviembre de 2021

En la segunda etapa del Gobierno se potencian las diferencias en el Frente de Todos

La saga de errores en el seno del “albertismo” persiste. Desde el Instituto Patria nada pasa desapercibido y todo es observado con sigilo y un prudente silencio, el mismo que se mantuvo (y mantiene) en torno al acto del Día de la Militancia, donde por primera vez el presidente Fernández se animó a mostrar cierta rebeldía ante el kirchnerismo, quizás recostado en la creencia de que tal vez, con el respaldo de la CGT y las desmembradas organizaciones sociales que integran el Frente de Todos, le alcance para materializar una suerte de gesta independentista de resultados impredecibles.

La frase de Cristina Kirchner sobre los “funcionarios que no funcionan” volvió a resonar en el incómodo silencio que siguió al yerro del ahora canciller Santiago Cafiero en el Palacio San Martín, cuando en el lanzamiento de la Mesa “Malvinas 40 años”, marró la fecha de la gesta de La Vuelta de Obligado.  El jefe de Estado intentó hacerle llegar un machete de ayuda al exjefe de Gabinete aclarándole que el hecho no ocurrió en 1845 sino en 1865, eso descolocó al funcionario que empezó a cometer una seguidilla de errores de lectura que generaron un gran embrollo discursivo, de esos que varias veces tuvo el propio mandatario.

En esa misma sede diplomática siguieron las controversias después de que el embajador argentino en Chile, Rafael Bielsa, se manifestara públicamente con duras críticas al candidato ganador de las elecciones en ese país, José Antonio Kast, a quien igualó con Jair Bolsonaro y Donald Trump, y calificó de derechista rupturista, además de pinochetista y antiargentino. La cancillería trasandina salió a objetar las declaraciones catalogándolas de “intromisión inaceptable”. Lo más complicado para la administración central, es que a esa queja se plegó el actual presidente Sebastián Piñera, y hasta el mismo candidato que en teoría tiene más afinidad con el Gobierno nacional, Gabriel Boric, el hombre que irá al balotaje con Kast. En Casa de Gobierno se despegaron de las declaraciones de Bielsa y aseguraron que fueron a título personal.

Otro dato que preocupa en Balcarce 50, aunque se niegue, es que los controles de precios sobre más de 1400 productos de consumo masivo no están dando resultado, ya que las subas persisten. De hecho, el imparable incremento de las carnes llevó al secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, a cerrar un acuerdo sin antecedentes en materia de congelamientos en el valor de productos alimenticios. Selló un convenio con los principales supermercados de solo 72 hs -lo que duró el fin de semana largo por el Día de la Soberanía- para que no suban los cortes de consumo popular, entre ellos, el infaltable asado. Allí se reabrió otro frente de conflicto con el sector agropecuario, al que se le vuelve a advertir con un posible cierre de las exportaciones. Para rematar, Feletti habló de subir retenciones (con el aval del kirchnerismo), pero fue refutado inmediatamente por el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, un albertista del casi extinto Grupo Callao que milagrosamente sobrevivió a los cambios de Gabinete reclamados por la titular del Senado. Por su parte, la vocería del Ejecutivo minimizó la controversia, aunque señaló que eso ocurre cuando los funcionarios dan declaraciones en on o en off, “algo que hay que empezar a evitar”, apuntó, agregando que esto pasa además porque se habla demasiado con los periodistas. Lo increíble de estos dichos “en off”, es que fueron comentados a los acreditados en Casa Rosada en el Salón de Conferencias cuando terminó la clásica rueda de prensa de la titular de la Unidad de Comunicación de Gestión Presidencial, Gabriela Cerruti.

El martes, una numerosa movilización de organizaciones políticas y sociales que no son afines al Gobierno, salió a reclamar trabajo genuino, que se abone un aguinaldo a quienes reciben planes y el no pago de la deuda al FMI. La marcha copó el microcentro y desembocó en Plaza de Mayo. Los operadores oficialistas monitorearon con atención la importante convocatoria debido a la cercanía del 19 y 20 de diciembre, algo que siempre genera preocupación, pero en especial cuando el país tiene casi 19 millones de pobres, 5 millones de indigentes, y niveles de inflación interanual que alcanzan el 52,5 por ciento.

En mitad de la semana, el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, estuvo reunido con el jefe de Estado durante unas tres horas en su despacho del primer piso. Además de la micro -con un aumento del déficit del 83% nominal interanual debido a las medidas económicas tomadas para revertir el resultado de las PASO-, también la macro tiene en vilo a los funcionarios. Las acciones argentinas se hundieron en Wall Street cerca de un 20 %, y el Riesgo País alcanzó la cifra récord de 1.816 puntos.

En materia de seguridad interna, todavía no se habían calmado los coletazos por el asesinato a manos de la Policía del joven futbolista de Barracas Central, Lucas González -que cayó en la grieta que muchos alimentan comparando el caso con el asesinato del kiosquero de La Matanza, Roberto Sabo- que resurgió otro hecho de violencia en el sur con un crimen en el Paraje Cuesta del Ternero en Río Negro, donde en una disputa por tierras fue herido de muerte Elías Garay, integrante de la comunidad mapuche Lof Quemquemtreu. Este hecho motivó que se pronunciara el líder de ese colectivo, Facundo Jones Huala, quien llamó a que "la sangre sea vengada"mensaje que fue repudiado por la administración que encabeza Alberto Fernández.

Después del reclamo general que se hizo desde la Sala de Periodistas de Casa Rosada, debido a que dos acreditados fueron “suspendidos” de manera ilegítima y arbitraria por preguntas que molestaron al subsecretario de Comunicación y Prensa de la Presidencia, Marcelo Martín, hubo un incidente que enturbió más aún la tirante relación del Gobierno con los medios. Fue el ataque con bombas Molotov al diario Clarín, que hasta ahora quedó claro (según las actuaciones judiciales), no tiene ninguna relación con grupos vinculados al oficialismo, pero alentó a que los conglomerados mediáticos que no se llevan bien con quienes gestionan el Estado dejaran flotando suspicacias que reavivaron viejas rencillas entre el kirchnerismo y la corporación comunicacional que lideran Héctor MagnettoLucio PagliaroJorge RendoJosé Aranda y los hermanos Marcela y Felipe Noble.

En el contexto de un intento por acelerar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, aseguró que si se mantiene el crecimiento económico que ve el Gobierno nacional –de un 11,6 por ciento interanual- a fin de año quedarán sin efecto la prohibición de despidos, suspensiones, y la del pago de la doble indemnización. Estas aseveraciones surgieron exclusivamente del sector que responde al Presidente, ningún integrante del flanco cristinista se manifestó al respecto.

Con su proyecto camporista en la Provincia de Buenos Aires, junto a agrupaciones aleatorias como la de Amado BoudouAlicia Castro y Gabriel Mariotto (Soberanxs), junto al Nuevo Encuentro de Martín Sabatella, entre otras, únicamente Máximo Kirchner volvió al ruedo público en el encuentro que el gobernador Axel Kicillof tuvo con los intendentes del peronismo bonaerense, que en el contexto de “la remontada” electoral pidieron fondos por unos 18.000 millones de pesos y no cejaron en el reclamo de poder volver a ser reelectos. Algo que la exmandataria provincial, María Eugenia Vidal había bloqueado por ley en alianza con el Frente Renovador de Sergio Massa, quien tampoco faltó a la cita. El cónclave fue motorizado por el propio Fernández después de una cena con ediles en Olivos.

Por lo pronto, uno de los operadores más silenciosos que tiene el primer mandatario, Julio Vitobello (Secretario General de la Presidencia), fogoneó, como se hizo después de la derrota en las Primarias, que el Presidente vuelva a sus visitas de proximidad en la PBA. Se trata de esos encuentros (sin prensa) con diferentes actores de la sociedad civil y que, según publicita su entorno, tienen el fin de conocer de primera mano los problemas de la gente. Para quienes no son devotos del albertismo, este es el comienzo de una microcampaña de reelección que se asocia a la convocatoria que hizo el mandatario en el acto del Día de la Militancia para elegir en la próxima PASO a los candidatos frentetodistas del 2023.

Para eso falta mucho y todavía quedan en el tintero litros de gamas, tonalidades y matices. En el corto plazo y con la nueva estructura poselectoral en el Parlamento, el oficialismo deberá conseguir aprobar el Presupuesto, la ley de Hidrocarburos, de la Agroindustria, y varias más como la de Promoción al Turismo, sector que acaba de sufrir un inesperado batacazo que repudian las agencias del rubro, ya que el Banco Central prohibió la venta, mediante tarjetas de crédito, de pasajes y alojamiento en cuotas en el exterior con la finalidad de evitar la salida de más dólares. La portavoz Cerruti aseguró que la medida es “momentánea” y que “se da en el marco de estar saliendo de la crisis económica de los cuatro años del macrismo, los dos años de la pandemia y de estar en negociaciones para hacernos cargo de poder resolver la cuestión del pago de la deuda externa tomada durante el gobierno de Mauricio Macri”. La funcionaria, con rango de ministra, aclaró que no habrá excepciones en caso de enfermedad, trabajo, estudio u otra vicisitud, porque está abierta la posibilidad de financiar los viajes con sus tarjetas de otra manera, o esperando otro momento para salir del país. “No está en cuestión viajar”, en algunos casos cuando no puedan pagar en una cuota, como establece la medida, podrán hacerlo a tasas bajas, subrayó la vocera que a su vez garantizó que “las reservas del Central están robustas" y pidió a periodistas y a dirigentes de la oposición que no generen miedo, terror, “no le digamos a la gente que no va a poder viajar más”, no es así, cerró.      

De todos modos -y sin dudas- la madre de todas las batallas será el plan plurianual guzmanista que permita abrir las puertas a una negociación con el Fondo Monetario, pero que principalmente admita la continuidad de la tregua en el FdT. La vicepresidenta no se pronuncia sobre este punto fundamental, y eso es lo que genera dudas en todos los rincones del palacio rosado. No se entiende porque la ex mandataria es hablada por voceros albertistas. ¿Será que la jefa política del espacio avala desde el silencio, o es mal interpretada por quienes afirman que está de acuerdo con todo lo que propone y anuncia la corte albertiana?. En buen romance, esto se dilucidará cuando se conozcan las cláusulas y condiciones que deberá aceptar la Argentina a la hora de refrendar en nuevo contrato que la ate al organismo de crédito internacional, que vale decir, ya dijo que no habrá adecuación de plazos ni de tazas que beneficien al país.  

Fuente: Juan Pablo Peralta para Política y Medios (PYM)

No hay comentarios: