TBA, esa es la sigla de la empresa que tiene la concesión del colapsado Ferrocarril Sarmiento y que pertenece a los hermanos Claudio y Mario Cirigliano, dueños también del Grupo Plaza que posee varias líneas de colectivo de corta, media y larga distancia. Aquí tienen más información interesante que publicó Crítica Digital al respecto.
Lo que les quiero contar es una anécdota que ocurrió el 31 de diciembre del 2004, aquel año de la terrible tragedia de Cromañon. Resulta que en ese momento trabajaba en Canal 26 pero esa fecha me tocaba asueto. Fue entonces que decidimos ir con mi familia a pasar esa noche especial al pueblo de Lobos, a unos 100 km de Bs. As.. No tuvimos mejor idea que llegar en el tren, justamente la única línea que llega hasta allí es el Sarmiento de la empresa TBA y que sale precisamente desde la estación de Castelar. Así fue que a las diez de la mañana estuvimos para abordarlo. La formación era muy vieja, casi en ruinas y con no más de tres vagones, la misma partió atrasada pero salió. Íbamos disfrutando del paisaje bucólico cuando entre dos estaciones a mitad de camino (Mariano Acosta y Marcos Paz) la vieja locomotora, que me recordaba cuando los Ingalls iban de Walnut Grove a Mancato, feneció. Quedamos varados en el medios de la nada. Un tímido boletero del lejano oeste empezó a decir que nos iban a mandar una máquina desde Lobos para llegar. Las horas empezaron a transcurrir, el calor era insoportable, la máquina nunca llegó. Los víveres en nuestros bolsos empezaban a derretirse. Serían las dos de la tarde cuando una máquina vagón apareció por la parte trasera de nuestra formación y ahí nomas nos dijeron que con ella volveríamos a Castelar ¿cómo? dijimos desencajados ¿otra vez al punto de partida cuando ya estábamos más cerca del punto de llegada?. Parece que la idea era que brindáramos en viaje o parados en el medios del campo. Ahí comenzaron nuestras quejas. Aceptamos subir para retroceder una estación pero para que nos vengan a buscar desde Lobos, nos dijeron que sí. Cuando llegamos dimos cuentas de que la máquina que nos llevaba nos quería dejar ahí , vistos nuestros reclamos, y transportar a pasajeros varados que iban en la dirección contraria. El plan de la empresa era claro, si dejábamos volver ese destruido vagón con motor, nosotros pasaríamos las fiestas en las vías. Encaramos desaforados al encargado de la estación que como un idiota lo único que propuso, mientras le queríamos tirar la puerta abajo, fue devolvernos los boletos. Hicimos una asamblea improvisada y decidimos hacer un piquete en las vías, de ahí no se iría nadie hasta que la empresa no se hiciera cargo. Los viajeros que iban para Buenos Aires nos querían matar "ustedes los porteños resuelven todo con piquetes" nos gritaban. Los de la estación decían que en las centrales de TBA no los atendía nadie porque era fin de año. La gritería de pobres contra pobres duró un par de horas hasta que finalmente los viajeros del oeste desistieron, se negoció que el vagón nos llevaba a nosotros que estábamos más cerca y luego los pasaba a buscar a ellos para ir hacia el otro lado. Los lugareños nos contaron en medio de la bataola que para ellos todo eso era algo normal, lo cotidiano era llegar con varias horas de atraso o quedar a la vera de las vías hasta que un remís, que les salía muy caro, los iba a buscar. Alrededor de las siete de la tarde tocamos tierra lobense con toda una aventura encima que le debemos a los amigos de TBA. Un fin de año inolvidable.
5 comentarios:
Que interesante tu blog. Estoy fascinada con estos medios, nos permite intercambiar razonamientos, crónicas personales y de la realidad humana.
Saludos
Excelente blog, el diseño está fantástico. Me deberías enseñar, yo soy un queso para eso. Buenos temas y seré asiduo lector. Un abrazo
buenisima tu anecdota
me atrapo muchisimo
no puedo creer lo de TBA. o sea, lo expongo muy bien el tema en mi blog por eso no quiero explayarme mucho mas y aparte hoy no estoy mu lucido
una verguenza lo de TBA.
saludos
excelente el blog
Que mal rock estas anomalías que redactas. En Monterrey tenemos que soportar los altos costos del transporte colectivo, además del pésimo trato de los choferes mismos.
Paz mi buen.
Hola!!!!!!!!!!!
Tengo un ritmo lento, no se si encajo en este mundo, pero a mi ritmo jamás abandono...........................y aquí estoy de nuevo.
TRENES??, pensar que quieren trenes balas, seria bárbaro, si pudiéramos tener primero trenes COMUNES que anden bien y con vías nuevas y durmientes que no sean los que pusieron los ingleses allá en el siglo pasado.
No apoyo lo que hicieron los vándalos, quemando los trenes que no funcionan, pero tampoco apoyo lo que quiere hacer el gobierno, con un tren bala.
Un besote y abrazo de oso.
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